◾ Cáncer de piel: La cara es una de las áreas más propensas al crecimiento de cáncer de piel, incluyendo el melanoma. La exposición crónica al estrella aumenta el peligro de desarrollar este tipo de cáncer.

Por suerte, cada ocasión estamos más informados sobre el daño que puede hacernos una exposición solar excesiva, y si nos protegemos y lo complementamos con productos específicos como un buen sérum de vitamina c, retinol y otros activos antiedad, vamos a minimizar los pertenencias de nuestro brillante amigo sobre nosotros (¿hace falta que hablemos del cáncer de piel?).

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En casos de rosácea, Arantxa Arana se decidirseía por un cosmético que también realice influencia antirojeces, y resalta que “es imprescindible que no sean cremas solares con menos de FPS 50, pues la rosácea empeora mucho con la exposición al sol”.

Ten en cuenta que cuando la piel se broncea lo hace solo para protegerse, precisamente, del estrella. El bronceado es un mecanismo de defensa. No es "saludable" tener la piel muy morena.

Todo ello con un autor de protección SPF 30 (no muy stop, pero suficiente para los meses de frío) que frenará el estrés oxidativo y los daños provocados por el estrella.

Pero además, incorpora ácido glicirretínico, que fortalece la protección celular de la piel y los mecanismos reparadores del ADN para contrarrestar aún más los daños del estrella.

Otro de los protectores solares más recomendados para pieles grasas es este de Vichy.  Con SPF 50, tacto seco, duradero y sin brillos. 

por consiguiente, aunque tendrás que escoger un protector solar para pieles grasas, mixtas o secas según te convenga y tener cuidado con las manchas que puedan salirte (por tema hormonal sobre todo) y las que ya tengas, siempre conviene que escojas una protección alta.

La radiación infrarroja. Durante Visitar sitio mucho tiempo las cremas de protección solar se centraron en los UVA y los UVB pero, con el tiempo, se detectó que aunque los rayos infrarrojos no nos broncean ni son los responsables de las quemaduras solares, ocasionan lo que conocemos como estrés térmico.

Si tienes la piel sensible: Los protectores solares faciales no suelen tener fragancia o solo tienen un pueril fragancia, porque las fragancias son la anciano causa de la irritación de la piel, eso es mejor. Las fórmulas faciales con ceramidas, ácido hialurónico o avena coloidal ayudan a hidratar y calmar el cutis. Las pieles sensibles tienen menos probabilidades de reaccionar a los principios activos minerales (dióxido de titanio y óxido de zinc).

Como es de esperar, a la hora de nominar el tipo de fracasado que queremos, se aplica la método dependiendo de la clase de piel que tengamos (aunque, por supuesto, incluso puede ser cuestión de gustos). Arantxa Arana señala que los satinados “mantienen la piel brillante y luminosa, son fotoestables y resistentes al agua, están más indicados para pieles secas.

iStock De ser posible, siempre deberíamos usar protección 50 o 50+. Este núpuro hace referencia a los minutos que la crema protege nuestra piel. Por eso, sobre todo en verano y si estamos muchas horas al sol, debemos reponer la crema cada dos horas o cada tiempo que nos bañemos.

¡Ah! y recuerda que la cantidad también importa. "Tiene que cubrir correctamente la piel para que el producto sea eficaz. No importa que el solar sea de hacedor de protección muy stop (FPS50), si no te lo aplicas desinteresadamente, puede perder eficiencia y quemarte", comenta el Doctor Gabriel Serrano.